Noemí es una belleza de esas raciales que no dejan indiferente a nadie. El día de su boda iba “muy ella”, nada diferente de su día a día, por eso iba tan guapa. Su vestido de Franc Sarabia Costura, zapatos de Pedro Miralles y un ramo de Peonias rosas daban forma a esta novia que fue desde su casa a la Iglesia andando como manda la tradición en su pueblo de Los Corrales. Un espectáculo de belleza y sensibilidad. Qué viva la novia!!!!